Características esenciales de un Taller


El Taller nos compromete en tres direcciones:

  • Con Dios
  • Con nosotros mismos
  • Con los demás
En cada Sesión hay dos líneas fundamentales: 
  • Una Descendente: Dios nos habla (a través de su Palabra)
  • Una Ascendente: nosotros hablamos (respondemos) a Dios (a través de la Modalidad)

El Taller es un servicio:

1.     Laical. La mayoría de los Guías son laicos; todos los miembros de los equipos directivos son laicos, en estrecha unión con sus Pastores.
2.     Limitado. Una vez completadas las 15 Sesiones, damos por finalizada nuestra labor y nos retiramos.
3.     Abierto. Al Taller asisten simples cristianos, catequistas, agentes de Pastoral, militantes de grupos eclesiales, los alejados de la Iglesia, los excluidos de los sacramentos, evangélicos de diversas denominaciones, en suma quien desee asistir es sumamente bienvenido...

El Taller colabora no sólo a hacer Iglesia sino también a hacer Patria (sociedad) porque contribuye a la unidad y fortalecimiento de la familia. 

Tiene, pues, una dimensión evangélica y una dimensión humanitaria.